El Ayuntamiento de Murcia ha puesto en marcha el Primer Protocolo de Actuación Preventiva de Limpieza de patrimonio arqueológico, que se va a centrar en el sitio histórico de Monteagudo-Cabezo de Torres. Supervisados por un equipo de arqueólogos municipales, se han iniciado estos trabajos de limpieza preventiva y mantenimiento dentro del proyecto de Fortalezas del Rey Lobo, impulsado desde la Concejalía de Pedanías y Vertebración Territorial que lidera Marco Antonio Fernández.
El principal objetivo es garantizar la conservación tanto del monumento, como del sitio histórico y su entorno expositivo en condiciones óptimas de salubridad, seguridad y ornato. Algunas de las principales actuaciones es la eliminación de vegetación espontánea, que puede dañar gravemente las estructuras históricas, tanto en los caminos como sobre los propios restos arqueológicos; basuras aportadas por el viento y tierras desprendidas de los propios restos arqueológicos, principalmente.
El concejal de Pedanías y Vertebración Territorial, Marco Antonio Fernández, ha visitado el inicio de esta intervención realizada por un equipo formado por operarios especializados, según las necesidades, y supervisada por las arqueólogas municipales que determinan el itinerario a seguir y cómo proceder en cada caso.
"Se trata de un Protocolo de Actuación con una intervención destinada a eliminar elementos ajenos a los propios restos arqueológicos dentro de su espacio físico expositivo, como basura y hierbas, que alteran el ornato y la conservación de los restos, e impiden una adecuada contemplación del monumento", tal y como ha apuntado Marco Antonio Fernández, quien ha añadido que "las lluvias de las últimas semanas ha favorecido el crecimiento de vegetación que hay que eliminar con este plan de actuación".
Con un presupuesto de 18.000 euros, se trata de uno de los compromisos del Ayuntamiento dentro del Proyecto Las Fortalezas del Rey Lobo para poner en valor este sitio histórico, que ya cuenta con cientos de visitantes.
El Palacio de Ibn Mardanís, conocido como el Castillejo, forma parte del conjunto monumental de Monteagudo y está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), lo que refuerza la obligación legal y moral de protegerlo. Esta intervención se enmarca por tanto en el objetivo del Consistorio para fomentar la conservación preventiva del patrimonio arqueológico.
Para ello se ha suscrito un protocolo de actuación entre el Ayuntamiento y la Comunidad Autónoma, a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural, en el que se detallan las diferentes intervenciones a realizar por parte del Ayuntamiento, destacando la eliminación de elementos dentro de su espacio físico expositivo ya que alteran la conservación de los restos arqueológicos.
También contempla la eliminación de vegetación espontánea, que puede dañar gravemente las estructuras históricas, tanto en los caminos como sobre los propios restos arqueológicos, la limpieza de gravas decorativas, caminos, rampas y viales de acceso, y todo el entorno propiedad municipal, abarcando una superficie de unos 24.000m2.
De cara a su mantenimiento también está previsto el tratamiento herbicida y fungicida al final del periodo de actuación, para impedir el rebrote de vegetación en zonas señaladas.
Marco Antonio Fernández, responsable del proyecto Fortalezas del Rey Lobo, ha destacado que "con esta iniciativa desde el Ayuntamiento de Murcia refuerza su compromiso con la protección del patrimonio histórico respondiendo a los principios de conservación preventiva, y manteniendo uno de los espacios más valiosos del legado andalusí de la ciudad en condiciones dignas para su disfrute y estudio".
Preservar el patrimonio el principal objetivo de estas actuaciones
Los trabajos se van a centrar en el Castillejo, Torre junto al acceso del Castillejo, Restos Romanos del patio del Centro de Interpretación de San Cayetano, Alberca de Larache y Alberca del Molino Armero, y en los acceso al Castillo de Monteagudo.
Tal y como ha explicado Marco Antonio Fernández, las tareas se han iniciado en el Castillejo, por ser el enclave más visitado tras su apertura al público y la organización de eventos culturales, y en donde se realizará un mayor mantenimiento tras la limpieza inicial.
En concreto se va a limpiar en los recintos inferior y superior, el punto de encuentro de los visitantes (zona de la estrella), y en la subida al Palacio Ibn Mardanís. El procedimiento es el siguiente:
-Por medio de podas y extracción de raíces en espacios sin restos arqueológicos. Se podrá usar desbrozadora de hilo en suelo y en aquellos lugares que se precise y no afecten a las estructuras.
-Por medio de podas evitando el arranque de raíces cuando la vegetación ha crecido directamente sobre las estructuras arqueológicas. Corte de tallos o troncos de plantas con tijeras manuales. La retirada de vegetación se realizará con una pequeña desbrozadora y con tijeras, y el resto de limpieza de forma manual.
El Castillejo, al tratarse de una estructura al aire libre y de libre acceso, está especialmente expuesto a factores de degradación como el crecimiento incontrolado de vegetación. Estos elementos suponen una amenaza constante para la conservación de los muros de tapial y mampostería, las escaleras, rampas y demás elementos musealizados del conjunto.
Posteriormente se va a intervenir en los Restos Romanos ubicados en el Centro de Interpretación de San Cayetano, en Monteagudo, retirando igualmente la vegetación que ha crecido en el entorno, y limpieza de basura que se pueda encontrar.
También se va actuar en la subida desde el Centro de Interpretación hasta los pies del Castillo, y en las escalinatas limpiando la vegetación que ha crecido en los márgenes para que ese ascenso se realice en óptimas condiciones.
Hay que recordar que esta estructura defensiva de propiedad estatal se alza sobre el de alto del cerro, donde todos sus accesos son de propiedad municipal. La actuación principal se centrará en el acceso por la cara sur del cerro peatonal, donde se ubican las escaleras que comienzan en el Centro de Interpretación de San Cayetano.
El Sitio Histórico de Monteagudo-Cabezo de Torres abarca igualmente la alberca de Larache, el Huerto Hondo, que actualmente se encuentra protegido, pero sobre el que hay que retirar esa vegetación que puede afectar a los restos arqueológicos, y en la Alberca del Molino Armero.
De esta forma desde el Ayuntamiento se actúa para proteger y preservar el patrimonio expuesto al aire libre, para su adecuado mantenimiento y proyección a turistas y visitantes del parque arqueológico que conforman las Fortalezas del Rey Lobo.