Trasladan a Fiscalía el acto taurino de personas con acondroplasia de Murcia

Fundación Franz Weber remite un escrito a la Fiscalía de la Región

Ni el Ayuntamiento ni el Gobierno autonómico han cuestionado públicamente esta actividad taurina denunciada por humillante 

El Defensor del Pueblo y colectivos de personas con acondroplasia han mostrado posicionamientos en las últimas semanas 

La Fundación Franz Weber ha anunciado este miércoles la remisión urgente de un escrito a la Fiscalía de la Región de Murcia informando acerca de la posible realización de un espectáculo taurino de personas con acondroplasia en el término municipal de Murcia. 

Los naturalistas han impulsado un documento muy similar a la denuncia administrativa ante la Dirección General de Derechos de personas con discapacidad, señalando que varios colectivos y el Real Patronato sobre Discapacidad han mostrado sus posicionamientos en las últimas semanas. 

Así, fundamentan su puesta en conocimiento en la Ley General de derechos de las personas con discapacidad y de su inclusión social y su conocida disposición adicional decimotercera: 

“Quedan prohibidos los espectáculos o actividades recreativas en que se use a personas con discapacidad o esta circunstancia para suscitar la burla, la mofa o la irrisión del público de modo contrario al respeto debido a la dignidad humana.” 

Además, trasladan la Fiscalía que el Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de Naciones Unidas, advirtió a España en 2019 por “la forma en que se representa a las personas con enanismo en las corridas de toros.” Otro ejemplo más de que estas actividades tienen un componente vejatorio y afectan a la dignidad también de las personas no implicadas en las mismas. 

FFW sigue considerando muy grave que administraciones públicas puedan ignorar el marco legal para permitir unos mal llamados espectáculos humillantes, degradantes y lamentables para un colectivo poblacional con una condición física determinada. 

Rubén Pérez, coordinador de campañas, explica: 

“En los últimos años han aparecido en medios de comunicación testimonios de personas con acondroplasia que relataban las humillaciones, insultos y mofas que recibían tras realizarse estas actividades en su localidad de residencia.”  

“Rechazamos de plano escudarse en un supuesto derecho a realizar estos actos porque al final se traslada la idea de que es positivo mofarse de personas por su condición física y esto se extiende no solo a las displasias esqueléticas.” 

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