La intervención prevé la rehabilitación de 445 m2, la construcción de 243 m2 de obra nueva y el acondicionamiento de 553 m2 de parcela y viario
El jardín, que se dotará de palmeras, reservará un área porticada para instalar talleres de artesanos, que podrán mostrar así su modo de trabajar
El Alcalde Cámara muestra su satisfacción por recuperar el edificio más antiguo de la pedanía y, al mismo tiempo, impulsar la artesanía del belén, una de las mayores señas de identidad de Puente Tocinos
La recuperación del patrimonio arquitectónico e histórico, y de las raíces artesanas de Puente Tocinos van a estar presentes en un único proyecto: la rehabilitación de la Torre del Reloj para la creación de la Casa del Belén.
El Alcalde, Miguel Ángel Cámara, y el Consejero de Universidades, Empresa e Investigación, Salvador Marín, han presentado esta mañana el proyecto, enmarcado en un convenio de colaboración alcanzado entre ambas administraciones. Según dicho acuerdo, Urbamusa se ha encargado de su redacción y próxima contratación –posiblemente antes de abril-, mientras que la actuación se dota con 1 millón de euros aportados por la Consejería y la Agencia de Gestión de Energía de la Región de Murcia para su financiación.
La Torre del Reloj, localizada en el Carril de la Torre, dispone de una superficie de unos 635 metros cuadrados construidos, sobre una parcela de 1.175 metros cuadrados. Catalogado por el PGOU con grado de protección 2, la rehabilitación deberá respetar su configuración espacial y estructuras básicas, así como los elementos ornamentales más significativos de las fachadas: el escudo heráldico labrado en piedra, con las armas de los Ayllón y coronado por la cruz de Calatrava, y el reloj de sol. También se acondicionará la zona ajardinada posterior.
La intervención proyectada ahora, cuyas obras se prolongarán por espacio de 18 meses, prevé la rehabilitación de 445 metros cuadrados construidos y la ampliación del edificio original y actuaciones en el jardín trasero en otros 243 metros cuadrados. A estos 688 metros cuadrados hay que sumar otros 553 metros del acondicionamiento de la parcela y viario, lo que da un ámbito de actuación de 1.242 metros cuadrados.
Un jardín preparado para sol y lluvia
Según el proyecto del arquitecto Guillermo Jiménez Granero, la puerta principal de la torre, bajo el escudo nobiliario, dará paso a un vestíbulo de acceso en doble altura, desde donde se inicia el recorrido por las salas de exposición situadas en las andanas de planta baja y piso, utilizadas en su época para la cría del gusano de seda o almacén agrícola.
En la andana superior se plantearán exposiciones temporales y la de planta baja se reservará para la exposición permanente. A continuación se entrará en una sala de proyección para visualizar de pie un documental sobre la artesanía y la tradición del belén. El recorrido continuará por la zona de ampliación del edificio, que albergará una sala diáfana de exposición, abierta visualmente al jardín posterior mediante una gran cristalera.
En el jardín –donde se reubicarán o replantarán todas las palmeras existentes originalmente- se creará una zona de exposición al aire libre, con un área porticada donde se instalarán unas cubículos desplegables donde cada artesano podrá montar un taller y mostrar su modo de trabajar, o donde se podrán dar clases prácticas a colegios y otros colectivos sobre esta actividad artesana. Su amplitud permitiría habilitar un belén monumental o hacer el tradicional montaje navideño, incluso bajo una carpa.
Además, la colocación de un entoldado de lona corredizo garantizará el uso del jardín en días de lluvia o de fuerte sol. Se trata de un toldo solar, dotado de una cédula instalada para generar energía fotovoltaica que podría ser utilizada para abastecer el propio museo o, al menos, su fachada. Es un prototipo que se pondrá en funcionamiento para comprobar su rentabilidad y eficiencia.
Por otra parte en la primera planta de la parte antigua del edificio se ubicará, además de la zona de exposiciones temporales, un auditorio o sala de conferencias y se reservará un espacio para la asociación cultural Amigos del Belén.
El edificio más antiguo
La Torre del Reloj o Torre de los Ayllón es el edificio más antiguo de Puente Tocinos. De estilo barroco popular, fue levantado a mediados del Siglo XVIII como vivienda familiar de una familia noble y actualmente es de propiedad municipal.
Además de recuperar este patrimonio arquitectónico, el acuerdo entre el Ayuntamiento de Murcia y la Consejería de Universidades, Empresa e Investigación permitirá también recuperar la importancia de la artesanía del belén como componente sociocultural de Puente Tocinos, creando un soporte ideal para el mantenimiento de las señas de identidad de la localidad.
La constitución de la Casa del Belén contribuirá a apoyar la modernización, la estructura empresarial, la promoción y la formación de nuevos artesanos. Y lo hará en una pedanía cuyo primer artesano, Antonio Galán Rex, se instaló en el taller del “Tío Italiano” en 1930. Desde entonces, la tradición ha ido fortaleciéndose de tal modo que hoy se conoce a Puente Tocinos como la “Cuna del Belén”.
El nuevo museo permitirá crear así una zona de recuperación etnográfica, cultural, turística e histórica del municipio.
