El Espacio Molinos del Río-Caballerizas invita a los murcianos a retratar la etnografía, cultura y patrimonio rural de la Región

La sexta edición del concurso de fotografía pretende llegar a los 300 participantes

Vuelve, por sexto año consecutivo, el concurso de fotografía del Espacio Molinos del Río-Caballerizas que, en cada nueva edición, consigue superar el número de participantes y de calidad de los trabajos.

'Murcia. Etnografía, cultura y tradiciones', organizado por la Concejalía de Cultura a través del Espacio Molinos del Río-Caballerizas, mantiene, como en ediciones anteriores, dos categorías, las de 'Fotografía actual' (imágenes recientes sobre patrimonio etnográfico) y 'Fotografía histórica' (recopilación de fotografías antiguas procedentes de archivos familiares que constituyan documentos etnográficos), a la que se añade una tercera, 'El patrimonio rural'.

Así, tal y como se establece en el folleto del concurso, "hasta estos últimos años, se definía de una manera muy restrictiva el patrimonio rural, comprendiendo los edificios asociados a la explotación agrícola y sobre todo el "pequeño patrimonio rural" como lavaderos, molinos o capillas. Hoy los técnicos del Consejo de Europa dan al patrimonio una definición más amplia e incluyen el conjunto de elementos materiales e inmateriales que una comunidad humana ha establecido en el curso de la historia con un territorio. Los paisajes, los bienes inmobiliarios (ligados a explotaciones agrícolas, artesanales o de la vida cotidiana), los bienes mobiliarios (procedentes del uso doméstico, religioso o festivo) y los productos (vegetales, razas de animales locales o productos elaborados)".

Las bases del concurso, disponibles en internet, establecen que las fotografías versarán sobre cualquier aspecto que refleje el patrimonio histórico, cultural y etnográfico de alguna de las comarcas naturales que conforman la Región de Murcia.

El concurso está abierto a todas las personas de nacionalidad española mayores de 18 años que podrán participar tanto con fotografías analógicas como digitales, tanto a color como en blanco y negro. Tendrán que presentarse en formato mínimo de 24x30 y máximo de 30x 40 cm, excepto las fotografías antiguas, que se presentarán en su formato original.

Cada una de las tres modalidades está dotada con un primer y segundo premio de 600 y 400 euros, respectivamente, excepto la de fotografía histórica, cuyo premio es de 300 y 200 euros.

El plazo de presentación de trabajos finaliza el próximo 8 de abril, debiendo éstos dirigirse a la sede del concurso (Espacio Molinos del Río-Caballerizas) mediante correo postal o personalmente.

Todas las fotografías seleccionadas formarán parte de una exposición en este centro, además de publicarse en un catálogo.

Lo que se pretende con este concurso es fomentar la creatividad artística y documentar y divulgar nuestras tradiciones a la vez que sirve para rescatar imágenes de archivos familiares.

A lo largo de estos años, más de setecientas fotografías se han presentado en las distintas convocatorias. En ellas se han venido descubriendo lugares y escenas de nuestra cultura que, sin duda, nos ayudan a conocernos mejor y, por tanto, a valorar nuestra identidad.

Todas las imágenes que han participado en este concurso forman parte de la historia de la cultura de Murcia, todas ellas nos narran el trabajo, la fiesta, la arquitectura, la agricultura, la matanza, las romerías…etc., del campo, de la huerta y de la ciudad,  en definitiva nuestro patrimonio cultural.

Son fotografías de aficionados y de fotógrafos profesionales, de jóvenes y de mayores, de hombres y de mujeres que desean con sus imágenes documentar hechos y lugares que ellos conocen muy bien, momentos vividos en su entorno social que nos vertebran. Es una historia compartida.

El número de participantes y las instantáneas presentadas han ido en aumento a medida que se convocaban los certámenes, desde el primero que tuvo lugar en el año 2005. De las poco más de 60 fotografías presentadas en la primera edición hemos pasado a superar ampliamente las 200 instantáneas en las últimas convocatorias. El número de fotógrafos implicados en el concurso también se ha visto incrementado considerablemente, así como la calidad de las obras presentadas.

Otro aspecto a destacar es la diversidad geográfica de los testimonios documentales recopilados en estos años. Las obras presentadas prácticamente son representativas de todas las comarcas naturales de la región de Murcia. Las fiestas y ritos tradicionales, los paisajes, la arquitectura popular de Lorca y el resto de poblaciones del valle del Guadalentín, el campo de Cartagena, enclaves costeros como Mazarrón y Águilas, la Vega Media, la comarca del noroeste, Jumilla y Yecla y la huerta de Murcia han sido documentadas. 

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