Desde el próximo 1 de enero, los tres Espacios Jóvenes (La nave, 585 y El Palmar) podrían dejar de ser gestionados por los jóvenes en una decisión unilateral de la concejal de Igualdad, Juventud y Cooperación al Desarrollo Teresa Franco.
Esta decisión tomada únicamente por el equipo de gobierno municipal deja directamente a 5 jóvenes 2 hombres y 3 mujeres, una de ella embaraza de 6 meses sin empleo la próxima semana.
También más de 60 profesores que realizan los más de 130 talleres, ven peligrar una de sus fuentes de ingresos.
Cerca de las 50 asociaciones y colectivos que utilizan estos espacios, aún no saben cómo van a poder utilizar los centros el próximo curso.
En una maniobra sin aviso previo ni voluntad de negociación, el equipo de gobierno municipal impone un modelo que aparta a la juventud de la cogestión de estos espacios de participación juvenil para que su gestión dependa ahora de los políticos.
Otra de las consecuencias de esta decisión es la eliminación de la Tarjeta Joven “MurciaTotal” que el Consejo dejará de emitir, una tarjeta que permite a más de 13.000 jóvenes disfrutar de descuentos en decenas de establecimientos, como: Cines, peluquerías, aparcamientos, instalaciones deportivas… Tal y como indica la propia concejal Teresa Franco en su breve carta a destiempo y que parecería una burda inocentada si no estuviera jugando con el trabajo de varias personas y con las actividades formativas y lúdicas de miles de jóvenes dirigida al presidente de la entidad, Jesús Alcolea, la intención de Franco: “es funcionamiento técnico similar a otros equipamientos de proximidad repartidos por el municipio, como los Centros Culturales, Auditorios, Museos, Centros de Visitantes, Teatros, etc..” quitando de un plumazo la personalidad juvenil a estos centros.
La decisión de la concejal Teresa Franco es una decisión estrictamente política y basada en afirmaciones que no son ciertas, indica el presidente Jesús Alcolea.
“Nosotros siempre nos hemos regido por la legalidad, transparencia y participación” de hecho “no existe en Murcia ninguna asociación juvenil que haya solicitado entrar al Consejo y no se le haya permitido” Otro tema que afecta a los bolsillos de los murcianos es que el modelo de gestión que propone el Gobierno Municipal es que el coste de gestión de un solo centro según informes técnicos de la concejalía que es de cerca de 76.000€, cuando el consejo local de la juventud recibe una subvención de 100.000 para la gestión de los tres centros.
El Consejo quiere resaltar la incoherencia de la propia Concejal que en las últimas semanas había elevado a Junta de Gobierno la firma del convenio, mediante su propia propuesta, con las palabras que ahora refleja en su carta firmada "in extremis" a apenas 72 horas de Nochevieja.
En este sentido, el CLJM denuncia también que el nuevo equipo de gobierno había avalado el convenio y la subvención al Consejo Local mediante acuerdo de la Junta de Gobierno de 16 de julio de 2021, que adaptaba el Plan Estratégico de Subvenciones a la nueva estructura y líneas de trabajo del nuevo equipo de coalición, ratificando el mantenimiento del Convenio de cogestión de centros juveniles.
A mayor abundamiento, las dos modificaciones posteriores del Plan Estratégico de Subvenciones 2021-2023 del Ayuntamiento de Murcia, tanto la de 10 de septiembre como la más reciente de 19 de noviembre, no habían tocado este convenio, por lo que se demuestra que no tiene ninguna justificación su extinción.
Por ello, el Ayuntamiento de Murcia va contra sus propios acuerdos, incumpliendo el Plan Estratégico de Subvenciones 2021-2023, que marca al gobierno local las líneas estratégicas para este trienio, habiéndose demostrado que tanto el anterior equipo de gobierno municipal como el actual, habían validado este convenio.
Todo ello se puede comprobar en la web municipal, en la URL https://www.murcia.es/web/portal/plan-estrategico-desubvenciones-2021-2023 Por otro lado, el Consejo Local de la Juventud de Murcia va a requerir al equipo de gobierno los informes jurídicos y técnicos que validen el cambio de modelo de gestión de estos centros juveniles como servicio público, y que dicho cambio suponga un ahorro y no implique mayor gasto para el propio ayuntamiento a partir de ahora.
Igualmente, va a requerir los informes sobre los acuerdos necesarios para validar dicho cambio de modelo de gestión, así como si fuera necesario un acuerdo plenario como el que se tuvo que pasar por Pleno para el cambio de modelo de gestión de otros servicios tomados en fechas recientes
