Instalaron un altar en la calle en recuerdo de una calle Mayor llena de vida donde depositaron flores

El viernes 28 está prevista una gran manifestación funeral por el alma de Espinardo

El Ayuntamiento ha confirmado el inicio de las obras la próxima semana, incumpliendo la promesa dada por la Concejal asegurando que esto no se produciría hasta la construcción del disuasorio.

La calle Mayor ha sido escenario esta tarde de un velatorio por Espinardo ante el anuncio de unas obras que, denuncian los vecinos, supondrán el fin de la vida del pueblo.

Con esquelas anunciando la muerte de Espinardo, los vecinos depositaron flores en un altar erigido en homenaje a una calle Mayor llena de vida que ha sido el auténtico corazón de la localidad.

Lamentan que los paseos, historias, compras y aperitivos darán lugar ahora a una peligrosa carretera de cuatro carriles en la que se perderán árboles, sombras y aceras.

Este velatorio es el preludio del gran funeral manifestación por el alma de Espinardo que se celebrará el próximo día 28, para defender el pueblo lleno de vida que ha sido siempre.

El anuncio del inicio de las obras por el Ayuntamiento ha caído como un jarro de agua fría entre los vecinos, ya que supone incumplir la promesa dada por la Concejal Carmen Fructuoso y el presidente de la Junta Municipal, que aseguraron públicamente que las mismas no empezarían hasta que estuviera en marcha un disuasorio que ni siquiera se ha empezado a construir.

Espinardo es un clamor contra un plan que sólo servirá para reducir en un minuto el tiempo de los autobuses, pero que se llevará por delante la vida social y comercial de una calle Mayor plagada de carteles contra el Plan de Movilidad en los balcones y corazones en los árboles para pedir su conservación. Pero nada de esto parece importar a un ayuntamiento que se niega a dar respuesta a los más de 4.000 vecinos que han firmado en contra de un proyecto devastador.